lunes, 19 de agosto de 2013

“Que Matthei sea candidata nos abre muchas posibilidades de ser la segunda fuerza”

Marcel Claude: “Que Matthei sea candidata nos abre muchas posibilidades de ser la segunda fuerza”


La inscripción de su candidatura presidencial, al alero del Partido Humanista, fue masiva, al igual que cada una de las charlas y encuentros que Marcel Claude lleva a cabo a lo largo de Chile.
De alternativa, a su opción le queda ya bastante poco. El despliegue que ha tenido su campaña a través de las redes sociales es igual o mayor a la de los abanderados “tradicionales”. Su gran llegada con la juventud y con organizaciones sociales ha contribuido a que su opción “Todos a La Moneda” ya no sea sólo un proyecto de un grupo de soñadores, sino que una opción viable, que según el economista, “asegura gobernabilidad”.
- Mañana vence el plazo de inscripción de candidaturas. ¿Qué evaluación hace de su campaña hasta el momento?
- Hemos ido consolidando un proyecto político. Hoy tenemos 350 comandos a lo largo del país; más de 500 profesionales trabajando en la construcción programática. Nuestra orgánica se sustenta en más de 17 organizaciones. Podríamos decir que actualmente, “Todos a La Moneda” es la tercera fuerza política del país, lo que nos permitiría dar una tremenda sorpresa en noviembre.
- ¿Esa sorpresa sería pasar a segunda vuelta?
- Superar los dos dígitos ya sería una sorpresa para nosotros, pues le daría mayor legitimidad a este movimiento. Más contundente sería llegar a segunda vuelta, no es algo inalcanzable, y si lo hacemos, es imposible que no lleguemos a La Moneda.
- La gran duda de quienes “coquetean” con su opción es su capacidad de gobernar. ¿Con quién va a gobernar Marcel Claude si es elegido Presidente?
- Gente hay, te repito, tenemos 500 profesionales trabajando en la campaña de Santiago a Concepción, sin contar a quienes se están organizando en todo el país. Además, tenemos un frente de trabajadores con más de cien dirigentes sindicales; al movimiento estudiantil, a la Nueva Izquierda Universitaria, y por supuesto, a 17 organizaciones políticas. Ahora, si me preguntas si incluiría a algún ex ministro, por supuesto que no, a ninguno.
- Usted dice que el movimiento universitario está con su candidatura. ¿Qué le parece que ex dirigentes se hayan inscrito como independientes, rechazando toda posibilidad de pactar con la Nueva Mayoría?
- Me parece bien que ellos ingresen a la política y asuman una responsabilidad de ese tipo. Sólo les daría un consejo: ser candidato a diputado no es lo mismo que postular a un Oscar por mejor actor o actriz. Esto se trata de hacer política, de articular fuerzas entre el mundo estudiantil y el mundo de los trabajadores, de generar cambios, no de caer en el estrellato.
de matthei y el neoliberalismo
- ¿Cuál es su visión respecto de la política agrícola que debiera implementarse en Chile?
- Está el Decreto Ley 701, que es una basura, el cual ha privilegiado el uso del suelo para plantaciones forestales. Ante eso estamos complicados, hay que reducir la frontera forestal y así reutilizar esas tierras para agricultura orgánica, agricultura campesina, agricultura mapuche. Parte de la solución para el pueblo mapuche pasa por esto. También es importante restringir y rediseñar la política en torno a semillas. Por otra parte, se deben potenciar las políticas de apoyo, tanto crediticias, como de sustento técnico. Urgen políticas que permitan estabilizar los precios para evitar los vaivenes en los que siempre se desenvuelve la agricultura nacional.
- Usted ha dicho que la descentralización no pasa necesariamente por crear nuevas regiones. ¿Cuál es el modelo que propone para terminar con el centralismo?
- No es que no sea la solución, sino que a mi juicio, el tema pasa por una reasignación presupuestaria del Estado. No sacamos nada con tener nuevas regiones que no tienen capacidad de tomar decisiones, de adoptar sus propias políticas económicas, que no tienen presupuesto propio. Lo que hemos planteado es que hay que revisar la forma en la que están estructuradas las regiones que nos heredó la dictadura. Necesitamos una división más consistente con nuestra geografía y actividad económica, con criterios más funcionales. Somos partidarios de los parlamentos regionales y de los impuestos territoriales. La clave es lograr autonomía. Si a esto se suman nuevas regiones, bienvenidas, podríamos volver a la lógica de las antiguas 25 provincias.
- Esta autonomía que propone pasa necesariamente por una nueva Constitución...
- Exactamente. La descentralización del poder tiene que estar sancionada en una nueva Constitución que nazca de una Asamblea Constituyente. Es nuestra actual Carta Magna la que impide avanzar en descentralización, pues su carácter es unitario y centralista.
- Si fuera Gobierno, ¿Qué medidas adoptaría para salvaguardar la salud de las personas ante los episodios de contaminación atmosférica?
- Medidas inmediatas para solucionar este problema no hay, aquí no se trata de mala voluntad. La génesis de esto es que no hay fuentes de energía alternativas; no existe una oferta atractiva que invite a las personas a dejar la leña, todas las opciones son más caras. Hay que invertir para generar proyectos más baratos y subsidiar energías no contaminantes. Debemos pasar de un Estado que tiende a favorecer los negocios privados y su rentabilidad, a uno que se preocupe de los derechos de las personas. Debemos ser más exigentes respecto de empresas que emiten gases contaminantes, pero eso no se hace en Chile; se debe educar para lograr un cambio en el comportamiento de la gente. Son muchas las cosas por hacer, el problema no se resolverá inmediatamente.
- ¿Cuál es el análisis que hace respecto de las demás candidaturas, especialmente de las de la Nueva Mayoría y la Alianza?
- Nosotros esperamos llegar a segunda vuelta, lo más probable es que la derecha y Evelyn Matthei queden terceras, no hay que olvidar que esta candidata es una acólita del neoliberalismo. Todo el mundo sabe que ella tiene fantasías eróticas con las AFPs, con las isapres, con la inversión extranjera privada. Ella es una ideóloga contumaz del neoliberalismo, por lo tanto es muy difícil que una persona como ésta logre votación. Que ella esté allí nos abre muchas posibilidades de ser la segunda fuerza que entre a disputar las elecciones. Esta vez no va pasar lo mismo que con Marco Enríquez-Ominami el 2009.

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